Una niña decidio disfrazarce en Halloween de la Reina Isabel II, la pequeña Jalayne complemento su disfraz con una peluca blanca, un abrigo azul pálido con sombrero y guantes a juego, y un elegante collar de perlas.
La verdad que su vestiario no iba a pasar desapercivido porque era ridiculamente demasiado tierno y muy perfecto, relataba muy bien la vestimenta de la realeza, la mayor inspiración para el atuendo fue el hecho de que nuestros perros son los mejores amigos de nuestra hija. La madre de Jalayne meciona “Queríamos hacer algo donde todos pudieran incluirse juntos”. Ya que la reina tiene unos corgis y una afinidad por los perros, fue la primera opcion.
Pero lo mejor de todo es que el disfraz de Jalayne obtuvo el sello real de aprobación de la mismísima reina Isabel. Después de recibir muchos elogios por el disfraz, la madre de Jalayne decidió enviar una carta a la Reina con una foto de la niña vestida a su semejanza. Sutherland dice que fue durante el tiempo en que la Reina estaba enferma y esperaba que la animara, pero definitivamente no esperaba una respuesta. Sin embargo, solo un par de meses después, el 27 de diciembre, abrió su buzón y se sorprendió al encontrar una carta dirigida a su hija y grabada con el sello real del Castillo de Windsor.
La carta escrita por la dama de compañía de Su Majestad, el Excmo. Casarse con Morrison, la correspondencia expresa el deleite y la gratitud de la Reina por la foto. “La Reina desea que le escriba y le agradezca su carta y la fotografía que adjuntó cuidadosamente”, dice la misiva. “Su Majestad pensó que era muy amable de su parte escribirle, y la Reina se alegró de ver la fotografía de su hija, Jalayne, con su espléndido atuendo. Su Majestad espera que todos tengan una muy Feliz Navidad, y les adjunto un poco de información sobre las Mascotas Reales, que a Jalayne le gustaría tener”.