El amor y la necesidad o la convivencia no son lo mismo, descubrir a esa persona que en realidad amas o nos ama de verdad es muy difícil, pero con el tiempo las conductas, palabras y demostraciones se irán volviendo más honestas para detectar si vale la pena que estes con esa persona.
La vida en pareja puede ser difícil, hay personas que no te sueltan por que te necesitan a su lado, puede deberse a muchas factores tanto a un interesa económico, social, por miedo a la soledad o costumbre, es por eso que hoy veremos algunas señales de que tu pareja te necesita pero no te ama.
Señales de que un hombre te necesita pero no te ama:
Exige más de lo que da:
Si, para tu pareja se ha hecho habitual pedirte cosas emocionales o materiales pero cuando eres tú la que lo hace te da largas o simplemente te ignora, pone los pretextos más simples para no cumplir.
Te reclama cuando le haces quedar mal (según el) pero no pregunta por tu bienestar:
Es como si fueras un objeto, la novia o la esposa modelo, te usa para sobresalir pero no te pide tu opinión a la hora de tomar decisiones, no se preocupa por como te sientes y asume que solo lo que el siente importa.
Te da ordenes como si fueras un empleado suyo:
Es como si fueras un genio mágico, el pide y pide y espera que todo se cumpla, como y cuando el lo dice.
Se porta de lo más lindo cuando quiere algo de ti, y una vez lo consigue cambia:
Sus únicos momentos de romanticismo son cuando quiere algo de ti, pero una vez que tu cedes se aleja nuevamente, ni hablar que te abra su corazón, de que te sorprenda con algún detalle o que ponga tu satisfacción por encima de el.
Cuando está a punto de perderte se porta de lo más lindo, pero cuando te tiene segura se olvida de ti, has decidido dejarlo, alejarte y cuando te siente molesta o le lees la cartilla cambia, se convierte en la mejor pareja del mundo y cuando se te pasa el coraje vuelve a ser el mismo patán de siempre.
A su lado te sientes sola:
Cuando esta solo es un bulto, si, físicamente está contigo, pero su mente está en otro lugar y te hace sentir mal, te sientes mejor cuando él no está, imaginas una vida a su lado, pero es difícil que esos sueños se cumplan. A veces te ilusiona, hace planes, pero poco tiempo después caes en la realidad de que nada de eso será real porque no hace lo que le toca.
